Ahora que sabemos que Madrid acogerá dentro de un mes la próxima Cumbre sobre el Clima de Naciones Unidas (COP25), es un buen momento para reflexionar sobre nuestros hábitos: ver qué estamos haciendo bien y qué podríamos mejorar si queremos evitar el declive de nuestro querido planeta.
Hay algo que es innegable: vivimos rodeados de plástico. Y, lamentablemente, la mayoría de productos solo los utilizamos una vez antes de acabar en la basura. Envoltorios, envases, botellas, bolsas… Su vida útil es de unos 15 minutos y, sin embargo, pueden tardar más de 400 años en descomponerse. Una ingente cantidad de residuos que termina, sobre todo, en vertederos, pero también en playas, ríos u océanos. Y tú creías que con echarlos en el contenedor amarillo ya estaba todo hecho. Reciclar está bien, pero es solo el primero de muchos pasos que podemos dar para evitar que el medio ambiente acabe más contaminado de lo que ya está.
Pero, ¿cómo podemos erradicar el plástico de nuestras vidas cuando la mayor parte de los supermercados parecen una oda a este material? Nada más entrar en la tienda ya lo encontramos por todos lados. Nos lo ponen difícil, pero yo te digo que hacer la compra de forma responsable es posible. Primero, debemos tomar conciencia de todo lo que realmente necesitamos cada día, evitar aquello que sea prescindible y, finalmente, organizarnos. Ahí van 15 formas de reducir el uso del plástico (haz clic en las imágenes para más info):
1.- Cambia las bolsas de plástico por las de tela para hacer la compra.
2.- Opta por bolsas de malla para llevarte a casa las frutas y verduras que vayas a consumir.
3.- En la cocina, evita el film transparente. Para conservar los alimentos, elige papel de cera de abeja.
4.- Nada de encendedores o mecheros desechables. Las cerillas son una mejor opción.
5.- Bebe agua en botellas de vidrio o acero inoxidable.
6.- Y, si no puedes resistirte a beber en pajita, elige las de acero inoxidable.
7.- Si te gusta tomar un café de camino al trabajo, hazlo en tazas reutilizables como ésta.
8.- En el aseo también podemos evitar el plástico: usa un cepillo de dientes de bambú.
9.- Cambia los botes por gel y champú sólidos. No generan residuos y duran más.
10.- Si hay peques en la familia, los pañales de tela la elección más respetuosa con el entorno natural.
11.- Y para la lavadora, detergente en polvo y en caja de cartón, como antaño.
12.- Comprar alimentos a granel te permitirá, no solo reducir el plástico, también podrás ahorrar unos cuartos.
13.- Apuesta por el vidrio: reutiliza los frascos de encurtidos, miel o salsas para guardar todo tipo de alimentos en la despensa o en la nevera.
14.- Menaje: dile no al plástico y sí a la porcelana de toda la vida. Y, si buscas un material difícil de romper, una opción muy resistente es el acero inoxidable.
15.- Si comes en la oficina, el tupper, de vidrio o de metal.
Bonus track: Se acabó el mascar chicle. Su sabor es de lo más agradable (durante un rato), pero en realidad, lo que te llevas a la boca es un trozo de plástico.
Eliminar los plásticos de un solo uso llevará tiempo y requerirá acciones y decisiones por parte de políticos y empresas. Pero, tú y yo, que ya estamos concienciados y queremos un planeta limpio, podemos contribuir desde este preciso instante. ¿Empezamos?
Vivir de un modo más consciente nos reconciliará no solo con el Planeta, sino también con nosotros mismos, que, rara vez nos detenemos a hacer balance… o siquiera a descansar. Si es tu caso, seguro que también te interesa este artículo en el que te indico cómo apearte, cuando lo necesites, de ese tren de vida que llevas que va a velocidad supersónica.
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